Cuando entrenas con la cantera, con juniors con ilusión, y que lo hacen todo al dedillo, ves que el culturismo nunca morirá, mientras haya culturistas que vengan de abajo con ganas...
Ha pasado mucho tiempo, más de 15 años preparando a culturistas de todas clases, desde profesionales hasta amateurs, desde chicas a chavales, pero nunca olvido esos primeros pasos como preparador, cuando la ilusión se centraba en el amor al deporte. No voy a perder el tiempo con ideas y opiniones sobre por qué debería tratar de asumir una tarea monumental como el culturismo, pues si quieres cambiar tu cuerpo, estás enfermo y cansado de ser pequeño, débil y de no tener confianza en ti mismo, tienes el mismo sueño que muchos principiantes de la cantera tienen.
Quieres ser grande, fuerte, verte bien y tener confianza en ti mismo para enfrentar cualquier desafío que se te presente; no solo quieres cambiar tu cuerpo, pues quieres cambiar y mejorar cada aspecto de tu vida. Tienes la pasión, pero no sabes por dónde empezar o qué hacer, ¿ verdad ?.
Lo que significa la cantera para mi, mi mayor motivación
Cuando empiezo con la cantera, no temo en mostrar el camino, desde la nutrición, el entreno o los pequeños trucos que uno ha conseguido en los años dentro de esta actividad que es más que una vida; la idea es encender el fuego por debajo del trasero de muchos chavales o chicas, cuando creen que no pueden.
Durante la temporada lo que hago con la cantera es enseñar paso a paso a realizar los sueños que tienen; es como la hoja de ruta hacia la inmensidad absoluta sin exagerar y hablo del propio estilo de vida y no solo de competiciones. Lo primero que les digo siempre es que esto no será fácil; de hecho, este es un desafío completo que requiere de una fuerza de voluntad que es precisamente lo que muchos de mis amigos de la cantera lo tienen.
Sabiendo todo eso desde el principio, lo primero que hacemos es hacer la promesa de que se comprometerán desde el principio, con fuerza, con motivación. A partir de ese momento, les comprometo a hacer todo lo que sea necesario para finalmente lograr sus sueños de construir un físico enorme, musculoso y fuerte, sin renunciar o retroceder... desde ese instante sus sueños son mis sueños y el éxito de cada canterano es mi mayor motivación.
Mi experiencia realmente tiene mucho que ver con trabajar con la gran mayoría de los chicos y chicas de la cantera; asumo que no son máquinas y que no están preparados para sacrificar cada aspecto de la vida normal durante 10-15 semanas. En este punto, la mayoría de los preparadores pierden la paciencia con sus clientes porque no tienen el mismo nivel de dedicación para crear el "cuerpo perfecto", pero mi punto sobre la dedicación es el verdadero "quid2 del problema porque la motivación y los progresos que cada uno va teniendo demuestran el verdadero "nivel" que deben demostrar.
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Un preparador puede mantener la productividad máxima de cada canterano, pero mi vasta experiencia me dice lo contrario, porque la aptitud y la actitud se mezclan con esa resistencia mental que no siempre se da en un 100% o en un 90%... es el momento donde uno debe quebrar esa inestabilidad mental que se viene con la inseguridad en el caso de algunos o la egomanía/vanidad en el caso de otros.
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