Las realidades en cuarentena, ¡ cuidado con engordar ¡

Estamos en cuarentena y no podemos tapar el sol con un dedo y, aunque los políticos quieren manejar las masas, nuestra salud la manejamos nosotros.

El mundo está experimentando actualmente la pandemia de coronavirus (CoV). A finales de 2019, la infección por CoV comenzó en Wuhan, Hubei, China. Originalmente se llamaba 2019 nCoV y la Organización Mundial de la Salud la renombró CoVID-19 en febrero de 2020.

Esta epidemia comenzó con una infección de animal a humano, y la causa directa de la muerte generalmente se debe a la consiguiente neumonía atípica grave.

  • El CoVID-19 ha sido declarado una pandemia por la Organización Mundial de la Salud, y las personas en todos los países están en cuarentena para reducir la propagación del virus, lo que también disminuye el impacto en los recursos médicos.

Como la cuarentena/confinamiento está asociada/o a la interrupción de la rutina de trabajo, esto podría resultar en aburrimiento. El aburrimiento se ha asociado con una mayor ingesta de energía, así como con el consumo de mayores cantidades de grasas, carbohidratos y proteínas.

Los antojos, siempre los antojos

Además, durante la cuarentena, escuchar o leer continuamente sobre la pandemia sin interrupción puede ser estresante. En consecuencia, el estrés empuja a las personas a comer en exceso, principalmente buscando "alimentos reconfortantes" azucarados.

Este deseo de consumir un tipo específico de alimentos se define como "antojo de alimentos", que es un concepto multidimensional que incluye procesos emocionales (deseo intenso de comer), conductuales (búsqueda de alimentos), cognitivos (pensamientos sobre alimentos) y fisiológicos (salivación).

Los estudios ya han demostrado una diferencia de género en el antojo de alimentos, con una mayor prevalencia en mujeres que en hombres. El deseo de carbohidratos fomenta la producción de serotonina que a su vez tiene un efecto positivo en el estado de ánimo.

En cierto sentido, los alimentos ricos en carbohidratos pueden ser una forma de automedicarse contra el estrés y el efecto del deseo de carbohidratos en el bajo estado de ánimo es proporcional al índice glucémico de los alimentos.

El mal hábito y la obesidad

Este hábito nutricional insalubre podría aumentar el riesgo de desarrollar obesidad que, además de ser un estado crónico de inflamación, a menudo se complica con enfermedades cardíacas, diabetes y enfermedades pulmonares que han demostrado aumentar el riesgo de complicaciones más graves de CoVID-19.

El estrés relacionado con la cuarentena también provoca trastornos del sueño que a su vez empeoran aún más el estrés y aumentan la ingesta de alimentos, lo que da lugar a un círculo vicioso peligroso.

Así mismo, la falta de micronutrientes como ocurre entre las personas con sobrepeso u obesas, hace que las respuestas inmunes estén deterioradas, particularmente inmunidad mediada por células, función de fagocitos, producción de citoquinas, respuesta de anticuerpos secretores, afinidad de anticuerpos y el sistema del complemento, haciendo más susceptibles a infecciones virales.

El desayuno, más allá del café o el té

Por un lado las proteínas, sean consumidas como parte de una tortilla o un filete con huevos que acompañen al desayuno en cuarentena no solo brinda la energía necesaria al cuerpo, sino apoya sin duda la inmunidad.

Según una conclusión escrita en la WebMD Medical Reference en 2019, la proteína es vital para construir y reparar el tejido corporal y combatir las infecciones virales y bacterianas.

  • Los potenciadores, como los anticuerpos y las células del sistema inmune, dependen de las proteínas.

Esta referencia, así como la lógica y la experiencia indican que muy poca proteína en la dieta de un atleta puede provocar síntomas de debilidad, fatiga, apatía e inmunidad deficiente, todo lo contrario de lo que queremos en este período.

Por otro lado, las frutas y verduras que suministran micronutrientes pueden aumentar la función inmune; esto sucede porque algunos de estos micronutrientes como la vitamina E, la vitamina C y el betacaroteno, que son antioxidantes. Hay otro, como el ALA o el NAC, pero estoy hablando del desayuno con fuentes alimenticias.

La cena, otro momento crucial

En este contexto de esto de la cuarentena, es importante consumir alimentos que contengan o promuevan la síntesis de serotonina y melatonina en la cena.

  • Una considerable variedad de especies de vegetales, incluyendo raíces, hojas, frutas y semillas como almendras, plátanos, cerezas y avena contienen melatonina y/o serotonina.
  • Así mismo, los alimentos con proteínas como la leche y los productos lácteos son las principales fuentes del triptófano de aminoácidos que induce el sueño… algunas especies vegetales también lo son...

Además, el triptófano está involucrado en la regulación de la ingesta de saciedad y calorías a través de la serotonina, que reduce principalmente la ingesta de carbohidratos y grasas, e inhibe el neuropéptido Y, los péptidos de orexigénicos hipotalámicos más potentes.

Ahora bien, otro estudio publicado en el European Journal of Clinical Nutrition hace una semana indica que más allá de las propiedades que inducen el sueño de los alimentos de la cena, en el caso de los productos lácteos como el yogurt o el queso antes de dormir también podrían aumentar la actividad de las células asesinas naturales y reducir el riesgo de infecciones respiratorias.

¿ Cómo estás llevando tu dieta ?

Una respuesta a “Las realidades en cuarentena, ¡ cuidado con engordar ¡”

  1. Adicionalmente, se deber n considerar otros factores de riesgo como obesidad (IMC 30), tabaquismo, edad o que est n inmovilizados para el tratamiento con tofacitinib 10 mg, 2 veces al d a . Los pacientes actualmente en tratamiento con tofacitinib 10 mg, 2 veces al d a, deber n consultar con su m dico y aquellos de alto riesgo de EP deber n cambiar el tratamiento a otra alternativa terap utica. En pacientes con AR y AP deber utilizarse tofacitinib exclusivamente a la dosis autorizada para el tratamiento de dichas patolog as: 5 mg 2 veces al d a . Adem s, se recomienda a los pacientes no suspender el tratamiento ni cambiar la dosis del medicamento sin consultar previamente con su m dico (en este enlace te mostramos la alerta que se hab a emitido sobre el efecto perjudicial que pueden tener en los usuarios las cremas solares).

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