Cuando un culturista entrena y lo hace a su modo

El culturista tiene el potencial de llevar su arte directamente a Dios, a sus Dioses o a lo que le parezca como ser superior o no, pero cada vez que haces ejercicio, entrenas, para empujar ese extra, haces un depósito en la cuenta de tu vida.

Y cuanto más deposites, más opciones aparecerán...este es el terreno fértil del crecimiento, el valle de los Dioses…

Las imágenes que puedas crear, como muchos culturistas lo hicieron crean un campo de energía, que tiene sus propias expectativas, como en los iconos, la ley de atracción.

Creas una visión, esa visión tiene un campo de energía que te atrae. Entonces, a medida que avanzas hacia tu objetivo, tu objetivo lo lleva a ese campo de energía donde el éxito es un evento cotidiano.

Mientas pienso "la repetición es el camino hacia el éxito", no me refiero a una repetición de la zona de confort, sino a lo que te dicta tu conciencia, desde tu mente hasta tus músculos, donde el umbral de esfuerzo tiene a ser subjetivo.

Como todos sabemos, quiénes levantamos pesas, los que prosperamos con la cantidad de series y repeticiones, vamos pasando los años creando un efecto de acumulación de memoria muscular que dura toda la vida.

Esta autoconciencia, mediante el trabajo de gimnasio de innumerables horas, conduce al autorrespeto, que tiene la capacidad de querer a los demás, como esos chavales que entreno, a quien pongo todo el corazón para que aprendan lo que yo no tuve posibilidad de aprender en aquellos días hace más de 20 años.

La dedicación, determinación y paciencia de las acciones repetitivas crea tu propia sensación de saber que estás construyendo una base de salud, fuerza y ​​felicidad.

La vida es dulce cuando estás sano y feliz pensaba esta mañana, cuando me pesaba con ya casi 111 kg en ayunas, y no sé por qué me veo hasta mejor que con 100 kg... Más culturista, Más embrutecio, Más empotrador....

Este descanso me está viniendo de lujo, en breve me haré analíticas y a tratar de ver si llego a los 120 kg, que hace mucho que no cojo peso y eso me estaba ya pasando factura.

Más Feliz, Más Culturista

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